Hundiendome

Pareciera que estoy condenada al mismo sufrimiento, siempre tengo la esperanza de que no me volverá a suceder. Pero mi cabeza... estoy sintiendo una presión muy fuerte. Cierro los ojos con fuerza y los vuelvo a abrir, pero sigue allí.

Quisiera despertar, pero cada vez me voy hundiendo más. Alguien o algo me empuja cada vez hacia el fondo del océano.

Me resisto a ahogarme y aguanto la respiración. Quiero salir a la superficie!!

Escucho el sonido de las burbujas que salen rápidamente de mi boca. Alguien puede oír mis pensamientos? Hay alguien ahí?

Alguien por favor!! No me quiero hundir!!

El miedo me pesa, y sigo empujada hacia algo que no deseo, pero no puedo moverme. Solo soy consciente de que sigo viva.

Mi cuerpo quiere flotar y subir; mi liviandad y ligereza es como un corcho que desea salir a la superficie. Pero me pesa tanto mi cabeza. Es este miedo, esta advertencia de ahogarme y perderlo todo otra vez.

Me voy debilitando, no tengo la fuerza para subir, no puedo ver de que forma nadar hacia arriba, y entre más me falta esto, mayor es la fuerza que me lleva hacia el fondo.

Te necesito, por favor, no seas duro conmigo, necesito tu apoyo, no me sueltes por favor...no quiero hundirme otra vez...

Pero finalmente mis fuerzas no pueden, todo esta cayendo, no puedo más...

Tengo mucho miedo, no quiero hundirme, no puedo soportarlo. ¡Por favor, alguien ayúdeme!

...Finalmente me dejo hundir. 

Con los ojos cerrados me voy perdiendo en la oscuridad del océano, dejando todo esfuerzo y simplemente esperando que alguien pueda salvarme o esperando que el océano me lleve a donde quiera de nuevo.

23-5-18