Quiero transitar únicamente en sus senderos,
Quiero atesorar lo que contemplas diariamente,
Quiero que tus lágrimas se fundan con las mías,
Quiero encender amaneceres en tus iris,
Quiero que la la miel de tus ojos se mezcle con la claridad de lagos y de soles.
Quiero que me develes este misterio pertinaz
que hizo desaparecer todo lo visto por mis ojos
en un pasado desperdiciado hasta tu encuentro.
Quiero que no me mientan más crudos paisajes
que no existen ni reciben la luz sin tu mirada.
Quiero ser la mujer que llegando
a tus parpados descubra mi refugio.
Quiero preparar los lechos de estos días disecados
para que sean revividos al saber que los observas.
Quiero recuperar mi identidad y mis raíces desplazadas
cuando me aferre con fuerza al interior de tu mirada.