En un bosque muy lejano, de entre diversos árboles, había uno en especial del que vengo a hablarles...
Con muchos años de anterioridad se fue formando, siendo conocido como el más fuerte nunca antes visto.
Tanto fue así, que decidió poner a prueba su fortaleza; con confianza se antepuso a fuertes vientos, fríos intensos, sequías y tormentas...
...Pero un día, la oscuridad llegó y el invierno se sintió mucho más en ese periodo...
Aun en formación, se empezó a inclinar y doblar, sus hojas se fueron y empezó a decaer. Estaba solo.
Se mantuvo en esa postura toda la estación, sin embargo, para cuando fuera primavera, el peso de su cuerpo no le dejaría volver a erguirse, aun con voluntad de hacerlo.
Solo podía ser arrancado de raíz, dejar ese estado y volver a empezar en un nuevo árbol.
...Ahora, flores han crecido de su recuerdo. La esperanza de su regreso sabio y renovado mantiene floreciendo los campos del nuevo mundo.
20.12.2014